A problemas prácticos soluciones prácticas, no te engañes un armario es pura logística y hace falta una mentalidad absolutamente práctica para afrontarlo. Cómo organizar un armario de ropa de mujer es un problema que me atrevo a asegurar que hemos tenido que afrontar todas las mujeres, el eterno desastre de la extraña combinación Espacio/Tiempo.
En lo que respecta al concepto “tiempo” me refiero a la ocasión de uso, como “espacio” me refiero al espacio físico necesario para contener todas las prendas que posees de cada tipología. En la combinación de ambas encontrarás el orden que necesitas para no perderte y desesperarte en tu armario.
Necesitas la combinación de estas dos características fundamentales de la forma de vestir actual (ellas son las que definen a cualquier prenda de tu guardarropa), para guiarte en el laberinto del armario de una mujer moderna y son imprenscindibles para saber cómo organizar un armario de ropa de mujer.
Estos consejos son válidos para cualquier tipo de armario femenino, desde una habitación entera utilizada como cabina-armario hasta un armario convencional, aunque si dispones de mucho espacio, podrías preferir una clasificación por zonas.
Aun así y sea como sea tu armario, siempre es posible optimizar el espacio disponible de forma que te resulte más sencillo vestirte cada día.
Cómo organizar un armario de ropa de mujer. Pasos
Lo primero la logística. En lo que respecta a guardarropas yo te aconsejo siempre los percheros, puedes incluso adquirir los que se utilizan profesionalmente. Su aspecto industrial tiene mucho encanto y su practicidad es indudable. Si no te gustan siempre puedes improvisar, usa la imaginación, hacerte un perchero tu misma como el de la imagen, no es complicado.
También necesitarás un espacio donde tener prendas dobladas. No tienen porque ser cajones convencionales: una estantería para libros, un mueble de almacenamiento de cocina, un mueble para discos…
…busca lo que mejor se adapte a tu gusto, a los espacios y al estilo decorativo de tu casa y utilízalo. El truco está en olvidarse de la función original para la que ese mueble fue diseñado.
A continuación empezamos a colocar las prendas. Lo primero es clasificar las prendas por tipología, empezando por las prendas exteriores que probablemente son mucho menos numerosas.
En un perchero irá todo lo que se pueda colgar, no hagas excepciones en todo lo que respecta a prendas hechas con tejidos que no son elásticos, este tipo de prendas siempre están mejor y más protegidas cuando están colgadas.
Todo lo que sea género de punto tiene que ir doblado ya que, si cuelgas las prendas, su propio peso las irá deformando. La estructura de malla de estas prendas no es resistente y no mantendrá ni la forma ni, por tanto, las medidas originales.
En cuanto a las camisetas puedes elegir, colgadas o dobladas según el espacio de que dispongas, la cantidad de prendas que tienes de esta tipología o sencillamente según tu clasificación mental. Las camisetas son muy ligeras y no se deformarán con facilidad, aunque debes evaluar posibles excepciones. Las camisas pueden estar siempre colgadas para reconocerlas con facilidad.
Existe una clasificación precedente a esta que sólo tendremos en cuenta en este primer momento y es la clasificación de temporadas. Esta clasificación depende del espacio de que dispongas.
Mi consejo es que elijas dar prioridad de posición a la que tienes en uso en ese momento, poniendo en un extremo las de la temporada opuesta y cúbrelas con una protección. Para esta función puedes reciclar las bolsas que utilizan en la tintorería para entregarte las prendas limpias. También puedes utilizar un trozo de tela.
Estos conjuntos de prendas cubiertas harán de división entre las prendas de temporada que están en uso, evitando confusiones, además de mantener limpias las prendas que no usas.
Cuando hagas esta clasificación, encontrarás prendas que no tienen una temporada específica: camisetas y prendas de eventos y ocasiones especiales son las más comunes, incluso algún pantalón o falda hechos con un tejido de peso intermedio. Mezclar por ejemplo alguna prenda hecha con un tejido brillante o bordado en tu look casual de mujer cotidianos, es un gran acierto para actualizar un atuendo.
Sitúa ese tipo de prendas en un lugar a la vista y asígnales un espacio propio, ellas serán la “pimienta” de tus looks. Usa prendas y accesorios de este tipo sin abusar, bastará un toque para conseguir una imagen más interesante.
Con esto llegamos al principal problema a la hora de organizar un armario de ropa de mujer , ¡los zapatos!
La gestión del calzado depende necesariamente del espacio de que dispongas, pero sí existe una regla que te recomiendo mantener: No tengas nunca el calzado en un espacio abierto.
Puedes tener desprotegidos sólo los zapatos que utilizas con mucha regularidad en tu vida cotidiana, dos o tres pares. El resto debe estar protegido en cajas o cajones para que siempre estén perfectos cuando lo necesite. También puedes utilizar las clásicas bolsas individuales de fieltro.
Para reconocerlos y no tener que abrir siempre muchas bolsas o cajas cuando tienes prisa, es decir, casi siempre, pon fotos en el exterior de cada una con el modelo de zapato que contiene.
Yo los tengo en cajones-contenedor de plástico y siempre están perfectos, eso sí, debes limpiar las suelas antes de guardarlos.
Dos consejos para completar este post. Pon un espejo grande en el reverso de la puerta de la habitación donde esté el armario, (es un recurso muy útil) y si es posible ten siempre una silla en la que apoyar prendas que estés evaluando o descartando.
Si después de estos consejos no te queda claro cómo organizar un armario de ropa de mujercontrata mi servicio Fondo de armario y relájate, yo lo haré por ti.